martes, 23 de octubre de 2007

Ayer vi en una película que comenzaba con el mito de Orfeo y Eurídice, si es que no me equivoco, que cuentan que Eurídice fue llevada al Averno, y Orfeo quiso ir a rescatarla, y la condición para que ambos pudieran salir fue que, no importaba que pasara, en el camino de vuelta, Orfeo iría adelante de su amada, pero hasta no salir ambos a la luz, no debería voltear a mirarla, porque de ser así la perdería. Y como es de imaginar, justo al final del camino, casi al salir ambos a la luz, Orfeo no pudo resistir la emoción y los gritos de su amada, y volteó y así, la perdió para siempre.
La reflexión que plantea la película a continuación es si debemos mirar hacia atrás o dejar el pasado y mirar siempre el hoy o hacia adelante, y aquí se plantea una difícil elección, ¿verdad? Porque ¿ambas en un justo medio no es lo que realmente deberíamos elegir? Mirar mucho hacia el ayer nos desvía del mañana, quizá no nos deja perdonar, superar las cosas que nos pasaron, las adversidades, las piedras que dorteamos para llegar a donde estamos hoy. pero el excesode mirar hacia adelante nos hace confundir el día que estamos viviendo hoy, no nos deja disfrutar el presente tampoco. focalizarnos en el presente solamente, a su vez, no nos permite aprender de los errores del ayer, pensar en ellos ante una nueva elección, para no perder otra vez, y tampoco nos deja pensar en lo que queremos en un futuro, para orientar nuestra decisión hacia un camino que nos lleve a cumplir nuestros sueños. pero la cuestión es llegar a ese justo balance, para poder ser felices, disfrutando el hoy, aprendiendo del ayer, sin olvidarnos del mañana.
Me da mucha lástima la gente que vive llorando por lo que pasó en sus vidas hace x cantidad de años, ya que quizá si hoy se animaran a vivir su actualidad, serían felices, pero a veces es muy cómodo vivir en el ayer, en el camino ya andado, en vez de decidirse a marcar uno nuevo, en vez de jugarse por caminar un sendero en blanco, es muy cómodo quejarse y no hacerse responsable antes que decidir y bancarse las consecuencias de esa decisión. es muy fácil esconderse tras la marca del timepo y el polvo que ese pasado junta, antes de exponerse al sol, que quizá nos arrugue, pero nos da calor, y nos conforta.
Es triste también la gente que mira demasiado hacia adelante, y nunca usa recursos hoy por si le faltan mañana. Quizá mañana tenga todos esos recursos guardados pero nada de experiencia para saber como usarlos correctamente, y cuando llegue al final de su vida se encuentre con un montón de cosas materiañes, pero sin una sola anécdota. quizá el único consejo que pueda dar cuando le pidan uno sea "viví tu momento, el mío lo perdí tratando de decidir como lo iba a vivir". Por que de experiencias no tendrán nada para decir.
Nada más para aportar, simplemente que eso me llamó un poco a la reflexión... queda en cada uno como seguir viviendo su vida, solo un parate a pensarlo.

1 comentario:

Bruno dijo...

gracias por aconsejar a la gente sobre la vida, que sabia. besinios